lunes, junio 25, 2012

Si fuéramos lluvia, tendríamos más sentido.

    

Hay un momento entre junio y agosto, comúnmente llamado julio, donde los días desaceleran de a poco y casi como si no quisieran; las nubes visten su gris habitual y nos gusta decirle verano mientras esperamos simplemente que una probada de lluvia nos devuelva algo que el tiempo nos ha quitado. De alguna forma ese sonido de gotas reventando contra las ventanas, el suelo y lo que se ponga en su camino, es lo que hace lentas las tardes donde incluso el sol se ausenta temprano.
Recuerdo muchas noches donde las luces de la calle se reflejaban en pequeños ríos a los lados de calles poco frecuentadas, al mismo tiempo que buscaba esquivar los charcos o algunas otras veces en que quisiera haberme hundido en ellos. Las tardes de lluvia en ocasiones inspiran a quedarse en silencio y respirar lento, apreciar los nudos en los tallones de las paredes y buscarle formas al piso; quizá encender una sola luz que nos haga compañía a lo lejos y contarle algo, para esperar nos acompañe a dormir...


El volumen sube y baja en momentos pero la idea esencialmente es crear un ambiente cómodo, entre desolador y un poco más allá, para aprovechar un poco el frío húmedo de los días de nubes.


De una por una o todas dando clic a la imágen (junto al vídeo como es costumbre).
Feliz Julio.

lunes, febrero 13, 2012

Valentine's Mix.Tape... We've got Love, love, love...

    

Hay un momento de la vida en que todos creemos en el amor, entonces empezamos a ver lo difícil que es convencer al amor de creer en nosotros, en nuestras capacidades, responsabilidad y sobre todo en que estamos listos para ello. Quizá esa es la razón de tantas malas decisiones, o tal vez es simplemente que somos malos tomando decisiones; y es verdad, unos más que otros. 

Podría incurrir en decir que el catorceavo día del segundo mes del año no es más de lejos que otro día como cualquiera en un calendario, lo cual pienso que es en cierto sentido verdad. Nunca lo esperé pero siempre llegó; tampoco hice planes complicados pero a veces corría a comprar algo haciendo filas y con la esperanza de hallar algo único en un mar de detalles iguales. Con el tiempo empece a construir mis regalos, a veces malos, a veces peores pero llevaban mi nombre escrito a mano. Mucha gente menosprecia el valor de una carta o una llamada a media noche. 

Hay que recordar que el día del amor está rodeado de amistad y que una cosa lleva a otra, que todo es cíclico, que las personas aprenden a querer y que por más que intenten nunca olvidan. Recordar que no hay que quebrarse la cabeza, que no hay que morir de amores pero si, tal vez, morir amando. 

Lista de canciones: 

O puedes llevarte todas de una sola vez dando clic a la imagen. (Disponible ya)

Feliz martes.